Cuando la operación se lleva a cabo en niños, se recomienda mucho el período vacacional, principalmente debido al riesgo de lastimar sus orejas nuevas en el colegio. Se deben proteger las orejas al dormir y al vestirse con camisas de cuello ajustado ya que los pequeños son más susceptibles de lastimarse accidentalmente. Un adulto podrá llevar una vida normal casi de inmediato, volver a la oficina a los tres días y solo evitar el gimnasio por un mes.
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